Cómo funciona un embrague

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El funcionamiento de un embrague

Como funciona un embrague
Esquema que muestra las dos posiciones de un embrague: [A] posición de acoplamiento o "embragado", [B] posición de desacople o "desembragado". Ilustración © Enrique A. Chaparro

El funcionamiento de un embrague entra dentro de los conceptos básicos que es interesante que sepas sobre cómo funciona tu moto, así podrás comprender muchas otras cosas.

Te hemos explicado cómo funciona un motor de 4 tiempos y cómo funciona un motor de 2 tiempos, pero el funcionamiento de un embrague está estrechamente relacionado además a cómo cambiar de marchas al manejar una moto.

La función del embrague

La función del embrague es sencilla y fundamental al mismo tiempo. Es la pieza encargada de separar o unir el giro del motor a la transmisión de la rueda trasera. Es decir, que la transmisión de la fuerza se lleve a cabo o no.

Cuando en el cambio tenemos seleccionada la posición neutral (N) no hay ninguna marcha engranada y el motor gira libremente libre, pero cuando hay una marcha engranada el giro del motor se transmite a la rueda trasera, y la moto avanza.

Para que este proceso de pasar de neutral a una marcha, o de una marcha a otra, sea posible hacerlo suavemente existe el embrague, ya que en ese momento de transición de la transmisión es el encargado de unir o desunir ambas partes, motor y caja de cambios, y como resultado rueda trasera.

Las partes de un embrague

Antes de explicar cómo funciona es necesario saber de qué piezas se compone un embrague para poder comprender el proceso en sí.

Siguiendo el esquema de la ilustración superior podemos distinguir las diferentes partes de las que se compone un embrague. Siguiendo su numeración encontramos:

  1. Cigüeñal (de donde llega el giro del motor)
  2. Volante
  3. Disco de fricción
  4. Plato de presión
  5. Muelle o resorte de diafragma
  6. Eje conducido (donde es transmitido el giro del motor y va a la rueda)
  7. Cojinete de empuje
  8. Cubierta
  9. Anillos de apoyo
  10. Tornillos de fijación
  11. Anillos​
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Cómo funciona un embrague

Guiándonos por la ilustración superior distinguimos dos posiciones del embrague. En el caso de la figura [A] el embrague se encuentra acoplado o embragado, y en la figura [B] el embrague se encuentra desacoplado o desembragado. Es decir, en el primer caso todas las piezas están unidas, y en el segundo el volante y el disco de fricción están separados, sin que haya conexión entre ellos. Aquí vemos un disco de fricción, pero puede tratarse de un sistema multidisco igualmente.

En posición de reposo, cuando nosotros no interactuamos, el embrague se encuentra acoplado por el empuje del plato de presión, que hace que el disco de fricción haga contacto con el volante. Pero cuando el piloto presiona la maneta del embrague lo que consigue es que el disco de presión se separe del disco de fricción, por lo cual ambas partes quedan desunidas.

Imaginemos que el motor está en marcha. En tal caso el cigüeñal gira, y con él el volante al que está unido. Si el embrague está acoplado el movimiento es transmitido a la caja de cambios, pero si está desacoplado porque nosotros lo desembragamos manualmente a nuestra voluntad el giro del cigüeñal no llega a transmitirse al eje conducido, y por lo tanto tampoco a la caja de cambios.

Cuando cambiamos de marcha hacemos tres cosas a la vez: dejar de acelerar, accionar el embrague y cambiar de marcha. En ese momento desembragamos para que el proceso de cambio de marcha no se vea afectado por el giro del motor, y cuando soltamos el embrague y lo volvemos a embragar lo podemos hacer poco a poco para que, por fricción, las partes que pasan a estar en contacto se unan gradualmente y el paso a una nueva marcha suceda con suavidad.

Al accionar el embrague interrumpimos por tanto la conexión entre el motor y la caja de cambios, donde si está seleccionada la posición neutral (N) el giro no llegará a la transmisión secundaria y por tanto a la rueda, con el mismo resultado que obtendríamos si accionásemos el embrague. En el momento que en la caja de cambios hay una marcha engranada el giro del motor llega hasta la rueda trasera si el embrague está acoplado.

Más crucial es todavía cuando emprendemos la marcha y pasamos de estar parados a estar en movimiento. En ese caso el giro del motor y el volante al final del cigüeñal se van a encontrar un disco de fricción estático, y ahí es donde entra nuestro tacto para que el acople sea progresivo y podamos ponernos en marcha poco a poco. Si el motor se encuentra una rueda que no puede girar se calará y se parará, por lo que de nosotros depende que este proceso se lleve a cabo con éxito.

Para encontrar un ejemplo aún más gráfico, te recomendamos este vídeo sobre el funcionamiento de un embrague. El ejemplo se basa en el caso de un automóvil, pero en el caso de una moto el funcionamiento es exactamente igual.